Húmedo y frió. Mucha lluvia y poco sol. Pero la gente se me aparece afectuosa y amigable como contrapunto. Tiene que ser un país interesante porque su historia es muy variada. Los paisajes se me aparecen diferentes a los nuestros. Sé que es un país de emigrantes, pero la mayoría de los alemanes se me aparecen como personas grandes, con la piel clara y el cabello rojo o rubio. A todos les gusta la cerveza y las salchichas. Se me aparece la idea de un país donde la disciplina es importante.

La Alemania del ensueño. Lugar magnifico. Potencia mundial con una noble belleza que bautiza el lugar por fuera y por dentro. Amplias zonas verdes para descansar, soñar imaginar. La Selva Negra: un lugar mágico rebosante de vida y de inspiración.

El corazón de Alemania  lo ocupa el estómago: La gastronomía la cerveza, la invitación permanente a comer y echar un trago. Y para curar los excesos está la sabiduría de las aguas termales, que sanan cuerpo y alma.

La ciencia. Einstein, marcando el camino del siglo XX y XXI. La música de Beethoven, Bach, Brahms marcando el ritmo de buena parte de Europa.

La gente amable y hospitalaria-optimista para suplir la falta de sol y calor.

Alemania, la magia de los cuentos, a nuestro alcance. En unos días, el despertar.

Viajar es el mejor sueño. Soñar con lo que vas a ver es un anticipo de la felicidad que esperas. Alemania. Crucero por el Rin y el Mosela y dejar volar la imaginación. Miles de castillos se ven desde los barcos. Subes y bajas por las esclusas. Nos rodea gente alta alta rubia rubia con ojos claros claros. (¿Consiguió Hitler su objetivo?) Barriguitas cerveceras de las que están  orgullosos, solo hasta que les llevemos nuestros vinos.

País con múltiples variantes. Culto. Muy influyente en Europa y en el mundo.

Salidas y diversión con los amigos, cine en compañía, discotecas, cervecerías. Amistad.

Y sobre todo el fútbol como uno de los deportes mas practicados, seguidos y apoyados.

Es por la mañana. Me despierta una suave brisa fría que acaricia mis mejillas. Es la víspera de navidad. Miro por la ventana y veo una hermosa fuente de la que cuelgan chupiteles de hielo.  A su alrededor se extiende un peculiar mercado navideño donde la gente sonríe mientras escuchan a un pequeño grupo de niños cantando villancicos. Hacen sus compras para adornar el árbol de Navidad. de repente aparezco entre todos ellos, pasando desapercibido, como uno más. Hace mucho frío. La nieve cubre las calles y de repente aparece una pista de patinaje sobre hielo. Estoy patinando. Me resbalo. Me caigo de la cama.

Y me despierto. El día de Navidad, a la vuelta, todos compararemos para ver cuanto de lo imaginado era real.

Alberto Ortega García

Schumacher. Los cuentos de los Hermanos Grimm. Lutero. Mercedes. Porche. Einstein. Bosch. Bach. Selva Negra. BOSCH. El Rin. El Mosela. Hitler. Beethoven. Brahms. BMW. El Danubio. Berlín. Bayern. Múnich.

Navidad. Vuelta a casa. Comparamos sueño y realidad.

 Mañana la segunda parte.